La tarde del sábado 24 de Agosto se vivió a lo grande en la Apacheta del Éxodo Jujeño, en Barrio Güemes de Córdoba Capital. Más de 300 personas concurrieron la Feria a probar las diferentes comidas regionales que cada puesto ofrecía. Record total en venta y concurrencia, nadie quiso perderse el ritual de la Pachamama que sería el broche de oro del evento.

El clima fue ideal y a pura chicha, agua de pelones y api se disfrutó de una tarde soleada al compás de la música de bandas jujeñas. Fueron 28 puestos de artesanos y gastronomía jujeña que conformaron este gran evento organizado por el personal de Casa de Jujuy en Córdoba, quienes se encontraban allí desde la mañana temprano.

Todo empezó alrededor de las 13:30 hs con las canciones del Grupo de copleros de Pablo “el arisco” Díaz, para continuar con la banda de Ítalo Ramos, quienes vinieron de Humahuaca especialmente para la ocasión. También estuvo presente la banda de los chicos de LLaxtamasi y Amancay.

Los talleres de Casa de Jujuy también dijeron presente: las chicas de danza Caporal bailaron al ritmo de la música con la alegría que las caracteriza. Por su parte, el profesor Nelson Bravo, del taller de Cuecas y Bailecitos, bailó junto a sus alumnos quienes dejaron en claro que aquel baile les apasiona.

Hubieron sorpresas y regalos para todos los allí presentes. Se sortearon 20 entradas para ver a Los Tekis en la Peña Exodo Jujeño, una remera de la misma banda y  5 bolsas con objetos turísticos (gorra, remera, anotador y lapiceras de Jujuy Energía Viva). Las palabras del Director Alberto del Cura hicieron eco en toda la plaza para agradecer a todos los allí presente, invitándolos a que sean parte del broche de oro de la tarde: ofrendar a nuestra querida Pachamama.

Cerca de las 5 de la tarde ya se sentía el olor al sahumado que se iniciaba en el cuenco de tierra preparado para ser ofrendado. El ritual de la Pachamama estaba a punto de iniciar. La fila de gente para agradecer a la madre tierra se hizo visible a lo largo de toda la apacheta. Fueron más de 300 personas que quisieron ser parte de este ritual. Mientras se alimentaba a la tierra, se sentía la música de Andrés y Héctor, dueños de un gran talento en voz y guitarra. Hubo record de ventas en los puestos de comida, en la Feria que se organiza año a año desde que abrió sus puertas la Casa de Jujuy en Córdoba.